Según el tipo de juego, podrás usar un Joy‑Con en cada mano o compartir uno de ellos con un amigo.
Acopla los controles Joy‑Con a la consola Nintendo Switch y llévatela donde quieras
Imagina que tu Joy-Con es un vaso. Con la vibración HD, puedes sentir la diferencia conforme agregues cubos de hielo y agua al vaso. Es una sensación que va más allá de simples vibraciones.